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Los vecinos del Mercosur llenan el tanque con una de las naftas más baratas de la región

El congelamiento en los surtidores y el tipo de cambio se conjugan con la apertura de fronteras terrestres y la suba de la energía global.

En medio de la disparada de los precios internacionales de la energía, la Argentina vive un fenómeno que no registraba hace años. Por un lado, debe comprar parte del combustible para abastecer el merado interno a precio internacional, a la vez que evidencia largas filas de automovilistas de países vecinos que aprovechan para cargar naftas o gasoil de este lado de la frontera, reabiertas de manera gradual tras más de un año y medio cerradas.

La crisis energética global que tiene en alerta al mundo y ya ocasionó fuertes alzas de valores del combustible en buena países de América latina contrasta con el congelamiento de los precios al surtidor local, que la Argentina tiene desde mayo, y que en el sector creen no se modificará al menos hasta iniciado el 2022.

Ese precio y la diferencia cambiaria a su favor hacen que cada día más brasileños crucen los pasos fronterizos con Misiones y Corrientes para llenar el tanque hasta 60% más barato que en su país. A la vez, con la reapertura de las rutas con Paraguay y Uruguay esas postales se repetirán.

Cómo están los precios de la nafta en la Argentina y sus países vecinos

Al tipo de cambio oficial, la Argentina tiene hoy unas de las naftas más baratas de la región. El litro se ubica en US$0,971, según datos al 25 de octubre último del sitio especializado Global Petrol Price.

Solo en Bolivia, ese valor se ubica por debajo (uS$0.543). En tanto, en Brasil, la nafta está a US$1,144; en Uruguay se paga a US$1,615; en Paraguay a US$1,113 y en Chile a US$1,226.

El alza del petróleo a nivel internacional, que tocó los US$85 por barril en octubre, encendió las alertas en el sector. Se ubica cada vez más lejos del precio local, que se ubica en torno a US$50 por el acuerdo del llamado “barril criollo”.

Durante el mes pasado, las refinadoras limitaron ventas mayoristas de combustibles (principalmente de naftas y de gasoil más refinados) a los volúmenes comercializados de manera histórica y se dedicaron a abastecer sus propias redes de surtidores, señalan en el mercado.

La situación derivó en la queja de los dueños de las estaciones de bandera blancas (las que no tienen marca de una petrolera en particular y representan aproximadamente el 20% del total), que denunciaron estar sufriendo complicaciones para conseguir producto, tanto por precio como por cantidad.

Así lo explicó Guillermo Lego, gerente general de Cecha: “Si bien el precio al público está ‘congelado’, el valor mayorista está abierto y ahí sí hay aumentos. Las estaciones de bandera blanca se abastecen de los mayoristas, y no pueden absorber ese aumento, por lo que le va dejando de comprar”.

Cuántos combustibles y energía importó y cuánto exportó la Argentina en lo que va del 2021

Según los últimos datos disponibles del Indec, durante septiembre pasado, las exportaciones de Combustibles y Energía (CyE) aumentaron 135% por causa de una suba de 73% en los precios y de 36,7% en las cantidades. Todos los subrubros se incrementaron, salvo petróleo crudo (baja de US$39 millones). El que mostró mayores exportaciones fue gas de petróleo y otros hidrocarburos gaseosos y energía eléctrica (287 millones de dólares).

Del lado de la importación, el ente estadístico discrimina por Combustibles y Lubricantes. Ese sub-rubro creció en septiembre 77.8% interanual hasta US$448 millones, y acumula en lo que va del año US$2203 millones.

En tanto, las exportaciones energéticas suman US$3490 millones en los primeros nueve meses de 2021, 36,6% más que en el mismo período que el año anterior. En tanto, las compras al mundo de combustibles y lubricantes llegaron en ese lapso a US$4241 millones, 92,5% más que el año pasado.

La cuenta energética tiene en el gas, tanto para calefacción en invierno como para generación energética, uno de sus principales fuentes de salida de divisas del país. Se estima que este año la regasificación del fluido en los barcos asentados en los puertos insuma más de US$1100 millones, por encima de la mitad de los requerimientos de importación del rubro “energía”.

Ya las importaciones de gas de este invierno se hicieron con precios superiores a los estimados (en torno a US$13 por millón de BTU), aunque muy por debajo de lo que está la misma cantidad en Europa por estos días (entre US$50 y US$60).

Por Paula López

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