La inflación «liquida» al expendio y empresarios temen cierres
El sector de las estaciones de servicio afirma que la suba de costos duplica el porcentaje de aumento mensual acordado por las petroleras y el Gobierno.
El último incremento aplicado a los combustibles lejos estuvo de acercar una mejora a las estaciones de servicio. Ocurre que, si bien la suba se alineó con lo acordado por el Gobierno con las principales petroleras de la Argentina, el sector de la comercialización señala que nunca fue convocado a la hora de pactar, pero sí afronta el impacto de una inflación que no hace más que acelerarse. Los expendedores afirman que el aumento de los costos duplica el 4 por ciento mensual que viene aplicándose como incremento en los surtidores. Y reclaman ajustes al menos similares al índice inflacionario que se divulga mes a mes.
Desde entidades como la Cámara de Expendedores de Combustibles de Neuquén y Río Negro (CECNERN) señalan que el precio de la nafta súper debería costar al menos un 60 por ciento más para compensar los gastos de los estacioneros.
«El precio de la nafta varía según la petrolera y el lugar, pero si hablamos de la súper hoy debería valer entre 50 a 60 pesos más cara de ese precio«, declaró Carlos Pinto, vicepresidente de esa organización.
«Tenemos las paritarias que acompañan la inflación y a nosotros, que cobramos un porcentaje sobre el costo total del combustible, nos está afectado muy gravemente a muchas estaciones. Especialmente las de bajos volúmenes de venta como la línea sur y la cordillera», agregó.
El directivo no dudó en tildar a los incrementos pautados de «insuficientes», además de señalar que los empresarios del expendio se mantienen en situación de «alerta» ante la posibilidad de seguir engrosando sus números en rojo.
Costos en suba y rentabilidad en picada
Por el lado de la Federación Argentina de Expendedores de Naftas del Interior (FAENI) su titular, Alberto Boz, afirmó recientemente que existe «un retraso del precio final del combustible con respecto a lo que realmente cuesta. Hay quitas de impuestos, hay subsidios, hay prórrogas de otras partes de impuestos».
«Lo que pasa es que cuando en esos acuerdos no estamos los estacioneros no hay un correlato o una mejora de la rentabilidad de nuestro sector, que sigue ganando un porcentaje fijo sobre el precio final de venta», comentó.
«El combustible aumentó menos que la inflación y las estaciones tenemos un porcentaje fijo sobre el precio final de venta», expresó el directivo, quien además pidió al Gobierno que, al momento de establecer nuevos aumentos, «se liberen un par de puntos más para los estacioneros. De lo contrario, nos vamos a fundir todos».
«Todos los costos aumentan y así la inflación golpea en los salarios, los honorarios profesionales, la tasa municipal, la electricidad, la reparación de los surtidores. Todo está en función de la inflación. Esto quiere decir que mientras nuestros costos van de la mano con la inflación, nuestras ganancias vienen muy muy atrás», dijo.
La confederación de estacioneros expone nuevos cierres
Desde CECHA, la confederación que integra a los empresarios del expendio, recientemente se emitió un comunicado en el que se exponen las dificultades que atraviesa el sector.
Respecto del acuerdo vigente entre las empresas y el oficialismo, los expendedores señalaron que, «si bien da cierta previsibilidad al establecer un sendero de aumentos contenidos, lo que hace es poner en jaque a un sector que ha venido sobreviviendo en un contexto de incremento generalizado de los costos, precios intervenidos por el Estado y paritarias por encima de la inflación«.
Con un incremento proyectado del 8 por ciento en los combustibles para los próximos dos meses, la organización sostiene que carece de espalda financiera para cumplir con el aumento del 30 por ciento correspondiente a la paritaria del sector.
«CECHA exige una participación activa en la mesa conformada por el gobierno y las petroleras donde se debaten estos temas para poder aportar propuestas concretas que reviertan la grave situación que atraviesan. Actualmente, el sector ha sufrido el cierre de 40 estaciones blancas en el último año y temen que la situación empeore si no se toman medidas urgentes», remarcó la entidad.
Por Patricio Eleisegui
iProfesional