Energías renovables: el plan oficial para obtener u$s 1000 millones
El subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Basualdo, presentó un plan para proyectos de pequeña escala que sirvan para reemplazar importaciones de gas licuado y gasoil.
El Gobierno presentó la semana pasada su plan para atraer nuevas inversiones de pequeña escala en energías renovables, después de años de quietud en el sector.
A través de la Subsecretaría de Energía Eléctrica, que está a cargo de Federico Basualdo, el Gobierno busca el desarrollo de los «Mercados Eléctricos Regionales«, que puede sumar a la red unos 1000 megavatios (MW) de potencia, con inversiones cercanas los 1000 millones de dólares.
Las generadoras eléctricas fueron convocadas mediante la Resolución 330/2022 de la Secretaría de Energía -firmada por Darío Martínez– a presentar sus manifestaciones de interés hasta el 30 de junio para «incorporar generación renovable e instalaciones de almacenamiento de energía en puntos de la red con cuyo aporte disminuya y/o elimine restricciones de abastecimiento».
La nueva generación de energías renovables deberá servir para reducir el requerimiento de generación y/o importación forzada de otras fuentes de energía o diferir las necesidades de obras de infraestructura en la red eléctrica.
Más allá de la intención de «impulsar acciones para diversificar la matriz energética y promover fuentes de energía más sustentables», además de cumplir con la meta del 20% de participación de renovables en el consumo en 2025″, para el Gobierno es primordial sustituir las importaciones de energía (gas licuado y combustibles líquidos como gasoil y fuel oil).
Las compras de energía en el exterior -que en este año superarán largamente los 6000 millones de dólares– generan un agujero gigante en las reservas del Banco Central (BCRA) y desde hace más de 10 años son una de las principales causas de la falta de dólares, que afecta a la actividad productiva y tiene efectos determinantes sobre la inflación.
Según los estudios preliminares, hay un potencial de 64 proyectos distribuidos en 15 provincias, que sumarían unos 986 MW.
La idea oficial es aprovechar los espacios que van dejando algunas empresas en la red a partir de la rescisión de contratos de generación debido a la falta de financiamiento y otros problemas que tuvieron algunas generadoras -por lo general, pequeñas compañías novatas en la industria-.
Hasta la fecha, con la Resolución 1260/2021 se rescindieron los contratos de 604 MW, mientras que 288 MW están en proceso de rescisión por incumplimiento de la fecha programada y 100 MW adicionales por Rescisión de Común Acuerdo.
El Gobierno también busca que unas 3500 empresas categorizadas como Grandes Usuarios del Distribuidor (GUDI) agrupen sus compras de energía a través de las distribuidoras en el mercado mayorista.
Fuentes del sector privado consultadas contaron que están evaluando las características del plan, que a priori les parece positivo.
Basualdo, un funcionario de bajísimo perfil, viene ganando protagonismo con actos y reuniones en las últimas semanas.
En estos días habló en el Institute of the Americas sobre «transición energética», donde anticipó que se licitarán dos planes de ampliación del transporte eléctrico por unos u$s 2200 millones, que probablemente tendrá interés de China.
Asimismo, como líder de La Cámpora en cuestiones energéticas, el subsecretario de Energía Eléctrica, enfrentado al ministro de Economía, Martín Guzmán, viene pidiendo al secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz, destrabar el financiamiento chino de la central nuclear Atucha III.
Por Santiago Spaltro
El Cronista