Estacioneros mendocinos acusan una dura reducción del cupo de gasoil
Empresarios afirman que les bajaron el cupo al 45%. Por su parte, desde AMENA aseguran que no hay desabastecimiento, sino un estrés del sistema. Qué dicen los estacioneros de YPF, los más afectados. El impacto del panorama internacional.
Hay preocupación en las estaciones de servicio de la provincia debido a que sufren una notable reducción de la cantidad de gasoil que pueden vender y no hay explicaciones formales al respecto. Este hecho ha causado que algunas expendedoras se hayan quedado sin combustible. Desde AMENA afirman que no hay desabastecimiento, sino un «sistema estresado».
La reducción del cupo que les «bajan» habitualmente es del 45%. En algunos casos, más. A un estacionero de YPF de zona Este le bajaron de 3,7 millones de litros de gasoil en abril a 1,7 millones este mes y con ese stock deben cubrir su demanda, confirmaron al POST fuentes empresarias. Esta cantidad alcanza para una semana o un par de días, de acuerdo al movimiento que haya durante las jornadas.
La situación se repite en al menos cinco estaciones ubicadas en la Ruta 7. La única que tendría stock es la nueva YPF de Uspallata, justamente porque no tiene volumen histórico. Aunque fuentes del sector dijeron que también le retacean.
Por otro lado, los empresarios aseguran que no reciben explicaciones al respecto pero los efectos son evidentes. El fin de semana Axion se quedó sin combustible (en este caso, naftas). Todas las demás estaciones están con faltantes. La sospecha de algunos estacioneros es que hay menos producción o están exportando combustible porque no hay movimiento económico que justifique este panorama, afirman. La principal especulación es que no producen porque no conviene. O que no les es rentable Mendoza. Es más conveniente para las empresas vender el barril afuera a un valor promedio de US$100, que venderlo acá a un precio inferior a US$65.
Los estacioneros cuentan lo que pasa
Otro de los estacioneros grandes que comercializa combustibles de YPF confirmó el panorama. «Estamos todos con el mismo problema. YPF lleva tres meses aplicando cupos a las estaciones. Sobre todo a las que somos gasoleras. A principio de mes aprieta muchísimo el cupo, y luego, van soltando unos litros a fin de mes, o cuando hay un fin de semana largo… tal vez aflojen algo ahora con los feriados» comentó el responsable de una de las «grandes» de la zona. Y luego, explicó una cuestión de fondo. «Lo que ocurre, es que Mendoza y la CABA tienen los precios de combustibles más bajos del país y son menos rentables para las petroleras. En Mendoza YPF termina poniendo el mayor volumen, a un precio que ellos no quieren. Y encima, la porción más importante de ese volumen se la llevan los transportistas paraguayos, brasileros y chilenos. Cargan una vez en Capital Federal, siguen hasta Mendoza, y llegan a Chile con el combustible subsidiado. Es un combo peligroso… y la verdad es que las petroleras prefieren descargar volumen donde les es más rentable: Córdoba, San Luis, el norte, la provincia de Buenos Aires, y acá, se hacen los boludos todo lo que pueden» explicó, en un idioma bien claro. «Cuando las petroleras se ven políticamente apretadas, sueltan unos ‘litritos’ más. Hasta mediados de abril, cuando hubo ruido en la provincia por la cosecha, hubo volumen extra. Pero ahora, ya no. Por eso aprietan el cupo. Habrá que ver la semana que viene, con el ajuste de precios, aunque igual no les va a convenir…» dijo. Confirmó que les entregan con cupos que no superan los volúmenes históricos de hace uno y hasta dos años.
El actual presidente de la Asociación Mendocina de Expendedores de Nafta y Afines (A.M.E.N.A), Isabelino Rodríguez dijo al Post: «Hay faltante y estrés en el sistema derivado de que hay un 30% del combustible que Argentina no importa y eso se debe al precio del barril nacional». Y agregó: «El estrés es mayor en las estaciones Axion y eso produce un corrimiento de la demanda hacia otras petroleras. Es un problema generalizado propio de la situación internacional y de la diferencia entre nuestro crudo y el del exterior».
«Estamos haciendo gestiones en la Secretaría de Energía y con las petroleras para resolver la situación coyuntural. Sin embargo, no puede afirmarse que habrá desabastecimiento, sino un sistema estresado que afecta sobre todo al gasoil», aseguró Rodríguez.
Aumentos
Esta semana YPF implementó un aumento en sus combustibles base del 9% promedio país, incremento que «sigue al ajuste de precios realizado por las principales comercializadoras durante el fin de semana», según fuentes de la petrolera estatal.
«Previo a este aumento, la misma se ubicaba entre el 7% y 12% y provocaba un incremento de demanda hacia la red de YPF, generando importantes quiebres de productos en todo su sistema e impactando en el nivel de servicio hacia todos sus clientes», indicó la compañía en un comunicado.
Las empresas Axion y Shell subieron desde el primer minuto del domingo los precios de los combustibles entre 10,5% y 12% promedio.
Por su parte, YPF indicó que «en abril último, la demanda en el mercado local fue muy alta, en especial en gasoil que fue el mes de mayor demanda de la historia».
Los cambios en las variables que configuran el precio de venta al consumidor son claves para comprender el panorama. Entre ellas, la más importante es el precio internacional del crudo y el flujo de demanda, muy superior al de los días de pandemia.
Por otro lado, la invasión de Rusia a Ucrania causó un fuerte aumento del precio del barril, cómo así también golpearon con dureza las sanciones que recibió el país presidido por Putin, uno de los principales productores mundiales de gas y petróleo. En marzo, cuando se produjo el ataque de las fuerzas rusas, el Brent (barril de referencia) llegó a valer 130 dólares.
En Argentina tiene un valor promedio de 60 dólares, por lo tanto el mercado local se abastece con petróleo nacional, aunque hay un porcentaje que debe ser importado.
Al respecto, la petrolera estatal en 2021 importó el 20% del crudo en medio de una crisis causada por la notable brecha entre el marcado nacional e internacional agravada por el aumento de la cotización de la divisa norteamericana.
Por Florencia Silva
Mendoza Post