Neuquén está en su mejor pico de producción y Mendoza está en el peor momento histórico
Las dos caras de Vaca Muerta: La Secretaría de Energía de la Nación publicó que la explotación petrolera de Mendoza es la más baja del 1999. El ministro de Economía, Enrique Vaquié, argumentó que esa caída se viene amesetando y se esperanzó en la exploración en Vaca Muerta y en otras áreas de petróleo convencional.
La Secretaría de Energía de la Nación publicó datos en los que muestra que la producción petrolera nacional creció en este primer trimestre del 2023 un 11,4% respecto de ese periodo del año pasado, lo que supone un récord de los últimos 14 años. Pero a la par mostró como a diferencia de Neuquén que explota Vaca Muerta, la producción petrolera mendocina es la peor desde 1999.
De ese informe se desprende que si bien en estas tierras se esperanzan con la exploración en dos pozos que hace YPF en Vaca Muerta, los registros de explotación muestran que viene decreciendo en sus niveles de producción de forma constante.
En el primer trimestre del 2023, Mendoza produjo 781.425 m³ de crudo, el volumen más bajo desde que existe registro en 1999. En comparación al 2022, la caída fue del 1,3%.
En contrapartida, la producción de crudo de Neuquén alcanzó en el primer trimestre el máximo valor histórico para ese período, con 4.520.913 m³ extraídos. Con ese volumen, la provincia que explota Vaca Muerta logró un crecimiento del 27,4% con relación al año pasado y representó el 50% de la producción total nacional.
Los argumentos de Mendoza para explicar la caída de la producción petrolera
Pese a que la caída en la producción petrolera es indiscutible, desde el ministerio de Economía de Mendoza aseguraron que esa baja «se viene amesetando» y se mostraron esperanzados en que pueda empezar a revertirse la curva si se comprueba que hay petróleo no convencional en la lengua mendocina de Vaca Muerta y si avanza la explotación en otras áreas petroleras más antiguas, a las que el Gobierno apuntalará con incentivos del Mendoza Activa Petróleo.
«La explicación de por qué la producción petrolera de Neuquén tuvo esa alza es concretamente Vaca Muerta. Desde el gobierno de Cristina Fernández en adelante hay incentivos para quienes invierten ahí, y contra eso no hay como competir. Cualquier empresa que ve el diferencial de invertir ahí no lo duda, y por eso la presión del gobernador y mía para que YPF avance con la exploración de estos dos pozos para saber si en la zona mendocina hay crudo no convencional», comenzó argumentando el ministro Enrique Vaquié.
Si bien esperan que la producción del crudo convencional pueda remontar, cuando en el Gobierno se sinceran, aceptan que la mayor esperanza mendocina está en el crudo no convencional que pudiera surgir de Vaca Muerta, sencillamente porque leen que la tendencia de incentivo de producción se mantuvo desde la gestión de Cristina Kirchner, atravesó la de Mauricio Macri, se sostiene con Alberto Fernández y todo indica que se mantendrá como política de Estado.
Se especula con que en esos dos pozos, que generaron una inversión de 17 millones de dólares, se pueda avanzar con estimulación hidráulica en septiembre con la ilusión de que haya explotación en el 2024. Esa es la puerta para que se exploren otros 154 pozos más, lo que supondrían una inversión de unos 800 millones de dólares.
Cómo se incentiva la producción de petróleo convencional
Por otro lado, explican que la explotación de petróleo convencional se viene haciendo en pozos antiguos, que tienen más de 70 años de explotación, por lo que esa producción también cae por la sencilla razón de que se va agotando su producción. «Es lo que denominan declino natural» apuntan.
Sin embargo, desde Economía remarcan que la caída de la producción de petróleo convencional, según el área, rondó el 4% y que ahora esa tendencia se va reduciendo. «En 2022 fue apenas 1,1% menor a la registrada en el año anterior, representando la menor baja en la producción en los últimos 10 años», apuntan desde los registros mendocinos.
Para contrarrestar esa caída, en Mendoza se han propuesto incentivar las inversiones con planes de reactivación y optimización de pozos, y en paralelo la perforación de pozos productores.
Como ejemplo de ese incentivo, enumeran que en el área de Lindero de Piedra, en Malargüe, se le otorgó a la UTE, que conforman Emesa y la empresa Hattrick la concesión por 25 años, con un plan de inversión de 27 millones de dólares. Allí en 2022 se perforaron 3 pozos productivos y actualmente se encuentra en perforación el primero de 5 pozos más. En esa área se pasó de producir 29 metros cúbicos por día en el 2022 a 38 en este año.
Por su lado, en la zona de El Sosneado, se le prorrogó por 10 años la concesión a la Petroquímica Comodoro Rivadavia (PCR). Allí se perforaron 5 pozos y en este año proyectan perforar 4 pozos más.
En Chañares Herrados, las firmas Aconcagua / CrownPoint que hicieron una inversión de 85,7 millones de dólares en marzo del 2021, la producción se incrementó con picos de hasta el 130% de aquel trimestre al de este año.
«La apuesta de la provincia es incentivar inversiones, por ejemplo con Mendoza Activa Petróleo, que no podría competir con los subsidios nacionales, pero ayuda a las empresas medianas. Pero es claro que para hacer que la caída vaya disminuyendo y podamos producir más petróleo, es clave, por un lado, seguir explorando para encontrar áreas nuevas, seguir apostando a que Vaca Muerta pueda aportarnos un notorio incremento, y, por otro lado, esperar a que YPF avance en encontrar socios para explotar áreas como Barrancas y Vizcacheras, en las que tiene licitación hasta el 2026 y 2027″, remarcó Vaquié.
A eso se sumarían las 12 áreas petroleras que se licitarían este año, según lo que adelantó el gobernador Rodolfo Suárez en su discurso del 1 de mayo.
Rosana Villegas
Uno