Córdoba “inaugura” una estación con alto corte de biocombustible
Habilitó una boca de expendio en plena ciudad de Córdoba con surtidores de bioetanol y biodiesel al 17% y 20%, respectivamente, que en una primera instancia sólo lo expenderán a la flota de vehículos públicos, anticipó el ministro Fabián López. Acuerdo con Santa Fe para generar un corredor sustentable
El Gobierno de Córdoba acordó con un empresario del sector de combustibles habilitar los primeros dos surtidores para expendio de naftas y gasoil cortados 17% y 20%, respectivamente, con bioetanol y biodiésel, porcentaje sensiblemente superior al que determina la ley nacional en la materia.
La decisión fue confirmada por el ministro de Servicios Públicos, Fabián López, luego de acordar con un empresario, cuya estación de servicio se encuentra en avenida Sagrada Familia a metros de Costanera, la inclusión de dos surtidores exclusivos para la venta de ese combustible.
La medida desafía abiertamente al Gobierno nacional, que tiempo atrás y al momento de renovar la Ley de Biocombustibles, resolvió fijar en 5% el corte obligatorio del gasoil con biodiésel y en 12% el de las naftas con bioetanol.
No obstante y en función de la coyuntura de crisis energética mundial y los elevados precios para importar gasoil, la Nación resolvió por decreto elevar de manera extraordinaria a 12,5% el corte del biodiésel.
Como fuere, la administración de Juan Schiaretti se opuso fervientemente al texto de la nueva norma y pidió elevar mucho el porcentaje en Córdoba, en línea con países como Brasil.
En ese marco es que ocurre la habilitación de lo dos surtidores en una estación pública, los primeros en todo el país.
El surtidor de B20 expende gasoil con un corte de 20% de biodiésel, y el E17 vende naftas con un porcentaje de 17% de bioetanol.
Oficial y ¿público?
La decisión de habilitar estos dos surtidores en una estación de servicios de capital privado y abierta al público es un paso adelante respecto a las dos bocas de expendio que ya existen, una en la central Bazán de EPEC, y otra la de la Tamse.
Sin embargo, la pregunta de rigor al ministro López fue si este nuevo paso implica que desde ahora un usuario particular podrá cargar combustible en esos surtidores.
“Por el momento es sólo para la flota pública pero en una instancia posterior la idea es que también puedan cargar vehículos particulares”, dijo el funcionario, evitando hablar de plazos.
Respecto al precio del litro, López aseguró que es un valor similar al que se paga al público en el surtidor aunque, en este caso, como no es de venta libre, el costo lo afronta la Provincia y surge de una fórmula polinómica que incluye varios puntos.
“A futuro, el precio al público debería ser más económico en el caso del E17. Para el B20 las condiciones son más complejas porque como es biodiésel a base de soja y hay una intervención constante sobre ese mercado por parte del Gobierno, además de una fluctuación permanente de los precios”, explicó López.
La flota oficial de la Provincia está integrada por unos 4.000 vehículos, señaló el ministro.
La intención es ir sumando actores a la cruzada. A los vehículos oficiales y a otros de municipios que firmen acuerdo con la Provincia -el último caso fue el de la Municipalidad de Río Cuarto- se sumará el transporte público y eventualmente el transporte de cargas.
Por lo demás, López indicó que en los próximos meses se avanzará con la habilitación de nuevos surtidores en estaciones de servicios en el marco de un acuerdo con Santa Fe para conformar un corredor de biocombustibles entre ambas provincias.
Regulan uso de movilidad eléctrica
El Concejo Deliberante tratará hoy cambios a la Ordenanza de Tránsito para regular el uso de la movilidad eléctrica en la ciudad, básicamente monopatines y bicicletas.
Según estimaciones oficiales, ya hay unos 10 mil usuarios en la ciudad de este tipo de vehículos, cuyo uso no está tipificado en las normas de tránsito.
El oficialismo pedirá el tratamiento sobre tablas del texto conjunto que surgió de las cuatro propuestas que se presentaron sobre el tema. El proyecto contaría con el aval de la oposición para lograr los dos tercios necesarios y acelerar la aprobación.
Según el texto de la futura norma, los usuarios de monopatines no necesitarán una licencia habilitante para poder conducirlos en la vía pública, aunque deberán ser mayores de 16 años. No está previsto que los vehículos deban registrarse.
Además, se les exigirá una póliza de seguro de responsabilidad civil contra terceros que podrá ser solicitada por los inspectores y exhibida en el celular, según establece el proyecto. El costo de la cobertura será variable de acuerdo con la calidad del monopatín.
Los usuarios deberán también circular con casco y usar chaleco refractario. El vehículo tendrá que contar con luces -trasera y delantera- y bocina. Será obligatorio circular con las luces encendidas tanto de noche como de día.
Podrán circular en carriles especiales como las ciclovías (donde no están permitidas las motos de mayor cilindrada).
Mientras que en las calles semaforizadas podrán tener zonas de detención preferenciales. También tendrán una velocidad máxima en ciclovías de hasta 20 kilómetros por hora y de hasta 30 en calles, en línea con la reglamentación de la Agencia Nacional de Seguridad Vial.
A su vez, estará prohibido circular con monopatines por veredas, sitios destinados exclusivamente a los peatones, como la Peatonal, autovías y autopistas. Tampoco podrán ir por la calle cuando existan ciclovías.
Comercio y Justicia