Fijan nuevos precios de biocombustibles, con aumentos que triplican la inflación prevista
Los aumentos impactarán en octubre, luego de que en septiembre se dispusieran dos ajustes para el biodiésel. El sector asegura que se opera sin márgenes de rentabilidad
La Secretaría de Energía fijó los nuevos precios mínimos de adquisición para el biodiésel y el bioetanol a base de caña de azúcar y de maíz que regirán en todo octubre, con aumentos diferenciados que podrían tener un impacto en los valores de venta de las naftas y el gasoil y que, además, amplían la brecha entre los dos tipos de biocombustibles.
Los aumentos respecto de los valores vigentes son del 6,71% en el caso del biodiésel y del 4% para las dos variantes del bioetanol, con lo que en diez meses de 2025 se acumulan incrementos del 41,72% y del 26,64%, respectivamente, con una inflación proyectada para el mismo período en torno al 24,5%.
Los nuevos precios se formalizaron a través de las resoluciones 385/2025 y 386/2025, ambas publicadas hoy en el Boletín Oficial, luego de que en septiembre se autorizaran dos aumentos en el caso del biodiésel.
Más que la inflación
Los ajustes aplicados muestran porcentajes que en el caso del bioetanol duplican a la inflación proyectada para el mes y más que la triplican en el del biodiésel.
Con la aplicación de las nuevas resoluciones, el precio mínimo de adquisición de biodiésel, destinado a su mezcla con gasoil, pasa a ser de $1.508.704 por tonelada, un 6,71% más que el vigente en septiembre de $1.413.861.
En el caso del bioetanol elaborado en base a caña de azúcar para su mezcla con naftas, el nuevo valor por litro es de $891,286, en tanto para el procesado con maíz pasa a ser de $816,887, en ambos casos con ajustes del 4% respecto de los niveles establecidos el mes pasado, de $857,006 y $785,468, respectivamente.
Precios retrasados y distorsionados
Pese a los incrementos, desde la industria de biocombustibles aseguraron a BAE Negocios que los precios de adquisición se encuentran retrasados respecto de los costos de explotación y que el sector opera con escasos márgenes de rentabilidad y , en determinados meses, con rentabilidad negativa.
“Somos la única commodity energética de la Argentina cuyos precios están fijados en pesos”, señaló Axel Boerr, presidente de la Cámara Panamericana de Biocombustibles Avanzados (Capba), con lo que tanto el biodiésel como el bioetanol quedaron retrasados en sus precios ante los incrementos de la cotización del dólar en las últimas semanas.
Además, advirtió sobre uno de los desfases menos comentados de la aplicación por tres días de las retenciones cero a granos y oleaginosa por medio del decreto 682/2025.
Como si siguieran las retenciones cero
Al respecto, si bien la vigencia de la medida fue de sólo tres días, indicó que por el volumen negociado “vamos a estar seis meses como si continuara la suspensión de los derechos de exportación”, lo que a su juicio incrementará el desfase entre los precios de adquisición y los costos de explotación.
Boerr explicó que la ley 27.640, que estableció el marco para los biocombustibles fijo en su artículo 14 que se le deberá garantizar a las empresas productoras “una rentabilidad determinada” por la Secretaría de Energía, que deberá considerar “los costos de su elaboración, transporte y el precio para producto puesto en su planta de producción”.
Sin embargo, el titular de Capba objetó que las últimas resoluciones de Energía no tienen en cuenta los aumentos de costos y, en consecuencia, tampoco los márgenes de rentabilidad.
“Se argumenta que los ajustes son más acotados para que no tengan un impacto en la inflación, parece que dejó de ser un fenómeno monetario”, acotó.
Al preguntársele si existen otros intereses, además de la necesidad de atenuar el impacto inflacionario, Boerr detalló que en el mercado local de combustibles “tres de cada cuatro litros se producen en la Argentina. El cuarto litro o bien proviene de los biocombustibles o bien se importa. Y a muchas petroleras les conviene importar gasoil antes que utilizar el biodiésel para la mezcla”.
Cómo se compone el precio de los combustibles
Los biocombustibles son uno de los cuatro componentes que se tienen en consideración para establecer los precios de las naftas y el gasoil, junto a la variación de la paridad entre el peso y el dólar, la cotización del barril de petróleo Brent y la carga que representan los impuestos a los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono.
Las nuevas estrategias de comercialización que comenzaron a implementar las principales compañías del mercado local del combustible, como el denominado micro pricing que ajuste los precios según los horarios de demanda, dificultan la evaluación del impacto que podría generar este ajuste en los biocombustibles en los valores a pagar por los usuarios.
Los bicombustibles están destinados a su mezcla obligatoria con los combustibles líquidos fósiles tradicionales (naftas y gasoil) hasta un 12% en el marco de lo dispuesto por la ley 27.640.
Pese a que los aumentos de agosto, septiembre y octubre superan a la inflación, las cámaras del sector vienen manifestando su disconformidad con lo que sostienen en una postergación de los incrementos correspondientes, en el propósito oficial de contener las subas en los precios de las naftas y el gasoil que también se da con la falta de adecuación en los impuestos a los Combustibles Líquidos y el Dióxido de Carbono.
Baenegocios
Por Marcelo Batiz
