El Gobierno tiene plazo hasta este jueves para definir la actualización pendiente del impuesto a los combustibles
Nación tiene plazo hasta este jueves 1 de agosto para definir si posterga total o parcialmente la actualización pendiente de los impuestos.
Agosto está a horas de comenzar, y con el inicio del mes no solo se espera una nueva suba en el precio de los combustibles de parte de las refinerías, sino que de no mediar una resolución que vuelva a postergar la actualización de los impuestos que rigen sobre la nafta y el gasoil, el incremento en los precios será marcado.
Existen dos impuestos que cargan el precio de los surtidores: el Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y el Impuesto al Dióxido de Carbono (IDC), que por su creación se deberían aplicar de forma trimestral tomando como parámetro de cada aumento la inflación acumulada.
Lo que sucedió es que durante el anterior gobierno de Alberto Fernández se formó una suerte de bola de nieve gigante, ya que fueron 30 los meses en los que se postergó la actualización de ambos impuestos.
Esa acumulación fue subsanada parcialmente desde el inicio de la actual gestión de Javier Milei, hasta mayo cuando se definió comenzar a frenar su actualización, buscando generar una menor impacto en la inflación general.
Es que el 1 de mayo estaba previsto por el Decreto 107/24 que se aplicara a los surtidores el incremento correspondiente a la inflación acumulada en el último trimestre del año pasado, pero llegada la fecha el Gobierno optó por emitir otro Decreto, el 375/24 que postergó por un mes el aumento y lo trasladó al 1 de junio.
El 28 de mayo, Nación optó por «reperfilar» los aumentos en los impuestos a los combustibles, ya que además de la carga del último trimestre del 2023, el 1 de junio debía sumarse una más: la inflación del primer trimestre de este año.
El tercer decreto sobre impuestos a los combustibles, el 466/24 marcó, a diferencia de los anteriores, algo que se repetiría un mes después, con el decreto 554/24 del 1 de julio, y es que en lugar de postergar totalmente la actualización impositiva acumulada, se optó por fijar en pesos los nuevos valores de los impuestos.
Esto hizo que en la práctica, la incidencia sobre el precio final de los combustibles fuera baja en ambos meses, cercan al 1%, pero como contrapartida empezó a generar una nueva bola de nieve de atrasos que tiene en septiembre otro punto de quiebre ya que ese mes debería cargarse la del segundo corte de este año.
Las refinerías también suben los combustibles
Paralelamente a los aumentos de impuestos, desde las refinerías se indicó que podría aplicarse una suba por su cuenta cercana al 2% en función de la devaluación del peso que realiza el gobierno todos los meses por el sistema de crawling peg y que se estima que se dará también a partir de este jueves 1 de agosto.
El CEO y Presidente de YPF, Horacio Marín, dijo este mes que los precios están «bastante cerca de la paridad de importación, en el caso del gasoil estamos casi en paridad, en las naftas todavía falta un poco, pero no mucho».
Una ecuación en la que inciden dos factores. Por un lado la caída de las ventas de combustibles que ya suman siete meses consecutivos. Y por el otro, el incremento de las exportaciones de productos refinados que las compañías vienen aprovechando a raíz de esta caída de las ventas locales.
Por Victoria Terzaghi
Río Negro